Aunque en esta ocasión vamos a centrarnos específicamente en la onicomicosis o infección por hongos en las uñas de los pies debes saber que en la farmacia recibimos numerosas consultas sobre infecciones por hongos en los pies.
Vamos a ver su origen, sus factores de riesgo, su tratamiento tópico y oral para acabar dando recomendaciones para aquellas personas que sufren de hongos en las uñas de los pies.
¿Por qué salen hongos en las uñas de los pies?
La onicomicosis es una infección por hongos que afecta la queratina de las uñas. Está causada principalmente por hongos dermatofitos, aunque también la pueden causar levaduras y otros hongos.
Es contagiosa y suelen aparecer con más frecuencia hongos en las uñas de los pies, representando más del 80% de los casos.
Inicialmente se manifiesta con la aparición de las uñas del pie blancas, manchas blancas o amarillentas en el extremo de la uña, cambios en el grosor, descamación, mayor fragilidad, agrietamiento e incluso desprendimiento de la uña en las fases más avanzadas.
Existe una serie de factores de riesgo que predisponen a esta infección, como son:
- Los ambientes cálidos y húmedos, como piscinas, saunas, vestuarios o gimnasios.
- La hiperhidrosis o sudoración excesiva.
- Sufrir pie de atleta, es decir, infección por hongos en la piel de los pies, que puede extenderse a las uñas.
- Tener un sistema inmunitario debilitado y/o problemas de circulación en los miembros inferiores. Por ello, las personas de edad avanzada se ven más afectadas. Asimismo, las personas diabéticas son un grupo más propenso a sufrir onicomicosis.
Tratamiento para hongos en las uñas de los pies
Normalmente, el tratamiento se realiza por vía tópica, siendo la laca ungueal el formato más adecuado. Este tratamiento permite que los principios activos permanezcan durante más tiempo en contacto con la uña, favoreciendo así su liberación de manera gradual y en las concentraciones adecuadas.
El tratamiento tópico está indicado cuando la matriz de la uña, es decir, la zona más próxima a la cutícula, no está afectada por el hongo.
En la farmacia disponemos de los siguientes tratamientos tópicos:
- Productos sanitarios de libre dispensación que actúan creando una barrera protectora, acidificando el medio y creando un ambiente desfavorable para el crecimiento de los hongos en las uñas. Además, pueden incorporar principios activos con acción antifúngica, como la piroctona olamina.
- Medicamentos antifúngicos, generalmente de prescripción médica, como la amorolfina en concentraciones al 5%, que se aplica de una a dos veces por semana durante unos seis meses para las uñas de las manos, y de nueve a doce meses en los casos de hongos en las uñas de los pies, o el ciclopiroxolamina en concentraciones al 8%. El primer mes se aplica en días alternos, disminuyendo posteriormente la frecuencia de aplicación hasta terminar con una aplicación semanal, con un periodo máximo de tratamiento de 6 meses.
Recordaremos al paciente que la parte de la uña deformada no mejorará pero la uña en crecimiento debería ser normal, y que el tratamiento de una onicomicosis es un proceso largo y laborioso y, que por ello, en muchas ocasiones el fracaso terapéutico es debido a que se abandona el tratamiento antes de tiempo.
El tratamiento sistémico por vía oral de prescripción médica se utiliza cuando la matriz de la uña se ha visto afectada o cuando el tratamiento por vía tópica no ha funcionado o no es bien tolerado. Se suelen prescribir fundamentalmente el itraconazol, el fluconazol o la terbinafina.
La combinación de un tratamiento por vía oral con un antifúngico por vía tópica ha demostrado una mayor eficacia, siendo el tratamiento de elección la combinación de terbinafina oral y amorolfina en laca.
Recomendaciones para evitar los hongos en las uñas de los pies
Desde la farmacia podemos hacer una serie de recomendaciones como:
- Una buena higiene de los pies, manteniendo limpia la uña infectada y evitando una sudoración excesiva.
- Evitar ambientes húmedos como vestuarios o piscinas y, si se frecuentan, utilizar chanclas o escarpines.
- Utilizar calzado que permita la transpiración.
- Lavarse las manos inmediatamente después de haber tocado la uña infectada para evitar el contagio a otras uñas. Por el mismo motivo, desinfectar todos los utensilios que hayan podido estar en contacto con la uña infectada y no compartir toallas.
- Es preferible no usar esmalte de uñas hasta que desaparezca la infección, aunque existen algunos productos que son compatibles.
- En aquellos casos en los que, además, pueda haber una infección de hongos en los pies, se debe tratar ésta al mismo tiempo con productos específicos. Y en el caso de las onicomicosis en las manos, utilizar guantes para evitar el contacto con detergentes y otras sustancias químicas irritantes.
Aunque los hongos en las uñas de los pies pueden ser una molestia persistente, existen varias opciones efectivas de tratamiento disponibles. Es fundamental abordar el problema con prontitud para prevenir complicaciones futuras. Además, mantener una buena higiene y cuidado de los pies puede ayudar a prevenir futuras infecciones por hongos.
Licenciado en Farmacia, Máster en Nutrición y Alimentación, Máster en Seguridad Alimentaria… y padre de mellizos. 😉