Cuando pensáis cómo conseguir la cura del vitíligo, seguramente os venga a la cabeza una modelo muy famosa con ciertas manchas blancas en la piel. Pues bien, estamos hablando de una modelo con vitíligo y en este post vamos a explicarlo un poco.
¿qué es y cómo dar con la cura del vitíligo?
El vitíligo se trata de una enfermedad cutánea que afecta la pigmentación de la piel. Se produce porque las propias defensas del cuerpo atacan a los melanocitos, que son las células de la epidermis responsables de dar color a la piel.
Como resultado aparecen manchas en la piel sin pigmento, de forma irregular y bordes bien delimitados, de mayor o menor extensión y en diferentes partes del cuerpo, siendo más frecuentes en las zonas que están expuestas a la luz solar, como manos, brazos, pies, cara y labios, aunque también puede afectar a los ojos y las mucosas de la nariz y de la boca.
Causas del vitíligo
Hasta ahora se desconocen las causas del vitíligo pero se ha visto una predisposición genética ya que muchos pacientes tienen antecedentes familiares.
Se cree que puede estar asociado a enfermedades autoinmunes como las relacionadas con la glándula tiroides, o que factores externos como quemaduras del sol, estrés, algunos medicamentos y ciertos traumatismos podrían desencadenarlo.
tratamiento para la cura del vitíligo
Aunque hoy en día todavía no existe una cura para el vitíligo, sí hay tratamientos para el vitíligo de prescripción médica que evitan que la enfermedad se agrave. La elección del tratamiento dependerá de la extensión y la ubicación de las distintas manchas, así como del grado de pigmentación de la zona de la piel que las rodea.
Repasemos brevemente estos tratamientos:
- La fototerapia con radiación ultravioleta A o PUVA es el tratamiento con el que se han conseguido mejores resultados. Se produce la activación de los melanocitos y se logra repigmentar la piel hasta en un 50% de los casos.
- La laserterapia se considera una de las terapias más efectivas junto a la fototerapia y se puede combinar con tratamientos tópicos.
- Las terapias despigmentantes tópicas con hidroquinona con el fin de unificar el color de la piel.
- El uso de corticoides tópicos en pacientes con un vitíligo no superior al 10% de la superficie corporal, especialmente en niños.
- El uso de inmunosopresores tópicos como el tacrolimus, que activan la proliferación de melanocitos y sus células precursoras. Estos fármacos constituyen una alternativa a los corticoides tópicos de alta potencia, ya que no producen adelgazamiento de la piel u otros efectos secundarios asociados a estos.
- Los corticoides por vía oral que se emplean en casos de progresión muy rápida del vitíligo.
Además, en muchos casos es necesaria la suplementación con vitamina D, ya que se han observado niveles muy bajos en pacientes con vitíligo.
¿El vitíligo es contagioso?
El vitíligo es un trastorno dermatológico benigno pero el vitíligo no es contagioso aunque si tiene una gran repercusión psicosocial en las personas que lo padecen.
¿Qué más hacer para conseguir la cura del vitíligo?
Es esencial el uso de fotoprotectores de amplio espectro con alto factor de protección porque debemos proteger especialmente las zonas afectadas, ya que las manchas blancas que no poseen melanina están más expuestas a quemaduras y lesiones más graves por efecto de la radiación solar.
No obstante, la aplicación de fotoprotector se realiza en toda la piel, no solo por seguridad, sino porque limitaremos el bronceado de la piel sana, evitando acentuar aún más la diferencia de color.
También, desde un punto de vista estético, podemos recomendar técnicas de camuflaje con maquillajes cubrientes que pueden tapar las manchas o la utilización de autobronceadores en las zonas no pigmentadas para igualar la tonalidad.
Por último, debemos advertir que los tratamientos para el vitíligo son largos y que es fundamental que el paciente sea constante y siga el tratamiento para conseguir resultados.
Aunque no se conoce aún la cura del vitíligo definitiva, existen tratamientos que pueden ayudar a reducir los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Licenciado en Farmacia, Máster en Nutrición y Alimentación, Máster en Seguridad Alimentaria… y padre de mellizos. 😉